viernes, 7 de enero de 2011

Stephen Hawking afirma que la filosofía ha muerto


El pistolero ha vuelto a la ciudad. En la última estancia, hace ya unos años, llegó cargado de munición y entrenado a consciencia; se cargó de un solo tiro a Dios, con dos  cojones bien engrasados.  Nadie se atrevió a respirar, sus argumentos eran poderosos y bien estructurados científicamente. Sólo Nietzche desde su tumba renegó algo así: “ ¡Jodio! que a ése cantamañanas ya lo maté yo, vaya merito el tuyo”.  Y ahora, nada más llegar y sin despeinarse, asesina a sangre fría a la Filosofía, por detrás y con pocas explicaciones.  La verdad es que tampoco ha sido muy original, la filosofía ya ha sufrido varios intentos de homicidio, cómo Feynmann, incluso suicidios; “Es una espacie de muerte en vida” Wittgenstein ya dio indicios con su lógica anti-filosofía. Nuevo debate, y una mierda. Un nuevo escenario donde representar la vieja  función intrínseca del ser humano. Hey!! Que conste que el qué suscribe, sólo intenta valorar dentro de sus más limitadas posibilidades, que son muy poquitas, una afirmación de un reconocido y respetado miembro de la ciencia actual. Pero lejos de amilanarme, rebato tal aserción.  Creo que con más pasión que con “lógica”.
El primer error  de Stephen Hawking es  tratar a la filosofía como una ciencia, nada mas fuera de lugar, para poder así eliminarla. Convierte la epistemología en método científico y de paso se come tres donuts para redondear. Leo la definición de Filosofía según la RAE: Conjunto de saberes que busca establecer, de manera racional, los principios más generales que organizan y orientan el conocimiento de la realidad, así como el sentido del obrar humano.  Y no veo en ninguna parte de la definición la palabra ciencia. Aunque podríamos objetar la propia definición, pero bastante tienen los académicos con lexicografía, gramática, ortografía… como para ponerse a filosofar sobre la misma. No veo a D. Arturo Pérez Reverte comentando a D. Antonio Mingote: “Ese humor español, mezquino y negro, eso sí que es filosofía con una par, no esas mariconadas”. Volviendo al tema en cuestión, el mismo conocimiento científico justificaría la verdad de su conocimiento. Una paradoja como la de similar a la que proponía Wittgenstein a Alan Touring , un sistema, de lógica, permanecería valido incluso si contenía una contradicción. Algo así como la ciencia detectara ser falsa, y aun así siguiera siendo verdadera. La picha hecha un lio gordiano que ni el propio Alejandro podría cortar por lo sano.
¿Quién delimitaría? ¿Quién encauza sin la razón? El propio método científico. Me causa escalofríos, uf!!
Posiblemente las preguntas que la filosofía se planteaba antaño han pasado ahora al reino de la poesía. Hemos aprendido a vivir sin Dios, ahora parece que le toca a la filosofía. Es como dejar de fumar, resulta de gran irritación. Y aunque grandes científicos promulguen sus “leyes” me niego a cumplirlas. Desobediencia ética y a las barricadas, mientras se combate hay esperanzas.